Con poca claridad y pobre futbol, la Selección de México avanzó a semifinales de la Copa Oro 2013, luego de derrotar por la mínima diferencia a Trinidad y Tobago, en partido de cuartos de final, disputado en el estadio Georgia Dome.
La única anotación del encuentro fue obra de Raúl Jiménez, al minuto 84, con lo que amarró su pase a la siguiente ronda en la que se verá las caras con Panamá, el próximo miércoles.
Los deseos existen, de eso no hay duda, el problema es que un partido de futbol, por más limitado que sea el rival, no se gana con eso, se necesita futbol y eso es algo de lo que carece este equipo que necesitó de “trompicones” para poder salir delante de este duelo y contra muchos pronósticos estar en semifinales.
En general un equipo que tiene más tiempo el balón, cuenta con mayores posibilidades de salir avante, sin embargo, de nada sirve si no se tiene la capacidad para reflejarlo en el marcador y eso fue lo que ocurrió precisamente en los primeros 45 minutos.
De hecho, fue el equipo caribeño el que tuvo la más peligrosa en la primera parte, apenas al minuto nueve en un disparo de Andre Boucaud que Jonathan Orozco, en una reacción providencial metió un manotazo para evitar la caída de su marco.
La respuesta del combinado que dirige José Manuel de la Torre, fue casi inmediata en un desborde por derecha de Miguel Layún, quien mandó un centro a primer poste donde Rafael Márquez Lugo conectó un remate de primera instancia que Jan Michael Williams, en un gran achique mandó a tiro de esquina.
Esto parecía ser un indicador de que el cuadro mexicano tendría un trámite más sencillo, al menos los disparos de Carlos Peña y de Márquez Lugo, así como un cabezazo de Raúl Jiménez, eso indicaban, aunque la realidad se encargó de desmentirlo.
Mas allá de esas tres aproximaciones, el desempeño sobre el terreno de juego del Tri, había sido muy pobre, el cual se mantuvo en el complemento, en el que mantuvo el control, pero sin poder inquietar con verdadero peligro la portería trinitaria.
Mientras que el cuadro isleño no se presionaba, sabía que el reloj era su aliado, pues entre más se consumiera el tiempo, la presión aumentaba para su rival y ese era el momento que ellos esperaban para salir con el triunfo.
Fiel a su costumbre de no hacer cambios hasta cerca del final, el “Chepo” entendió que su eje el ataque necesitaba un refresco, por lo que ordenó la salida de Márquez Lugo, para ingresar a Javier Orozco, quien tampoco aportó mucho para su causa.
Cuando ya “olía” al alargue, un centro por derecha de Layún a primer poste fue conectado de manera defectuosa por Jiménez, para que el balón se colara pegado al poste contrario y así darle un sufrido triunfo a México, que ya está en semifinales, donde buscará cobrar la afrenta sufrida en la primera fecha de este certamen ante el cuadro panameño.
El arbitraje estuvo a cargo del salvadoreño Joel Aguilar, quien tuvo una actuación aceptable. Amonestó a Randanfah Abu Bakr (58) y a Keon Daniel (60) por los trinitarios. Luis Montes (60) vio cartón preventivo por México.
Alineaciones
México: Orozco, Huiqui, Peña, Aldrete, Valenzuela, Layún, Castro, Montes, Jiménez, Marco Fabián y Márquez Lugo
Trinidad y Tobago: Williams, Cyrus, Jones, Edwards, Roberts, Glenn, Boucaud, Daniel Power, David y Abu Bakr
